Perú es el país invitado de honor a la edición 2021 de la FIL. Lo que de inmediato lleva a pensar en la participación que puede tener su música, un elemento que acompaña el programa literario de la gran fiesta cultural que se celebra anualmente en nuestra ciudad. A raíz de ello, va muy bien acercarnos a sonidos frescos provenientes de ese país. Para la ocasión, hablaré de tres talentos femeninos que renuevan la canción desde su visión. Pero antes de llegar a ello, por no dejar, pasemos lista a algunas de sus cantantes que son referencia obligada. Obvio, la enorme Chabuca Grande debe ser recordada, a la par de la singular Yma Sumac. Ello sin olvidar la gran referente del landó, la destacada Susana Baca; tampoco a una figura muy nuestra, la ya muy mexicana Tania Libertad. O bien, esa morena —no confundirla— de nombre Lucha Reyes. Todas ellas como las grandes. Ahora hablemos de tres de las más jóvenes.
Danitse
Propulsada por un estética de corte folk, con guiños incluso a la música country, a Danitse le gusta especialmente el sonido de la guitarra y las muchas posibilidades que tiene ésta para dar color a su voz. Pero de igual forma recurre al piano. De la tierra al sol (2019), su segundo álbum, es la prueba contundente de ello. Ya desde sus dos primeras canciones se intuye hacia dónde es que ella parece encaminarse en lo musical. “El miedo” es acústica, evocadora de Joni Mitchell, y Violeta Parra, de un ropaje austero —voz, seis cuerdas y percusión en su primera parte—, exhibe la convincente voz de su autora. “Detén el fuego” nos acerca a un lado más intenso; sus guitarras al estilo de El Twanguero, como de viejo oeste, hablan de la potencia a la que ella puede llegar cuando lo busca. En ambas queda clara su preocupación por letras que comuniquen, pero que asimismo destellen fuerza poética. En la primera, Danitse canta: Dentro de ti algo espera / A hacerse realidad / Dejas la piel primera / ¿Quién serás ahora al volver? / Sin guía ante la duda / Alguien sabe a dónde voy / La libertad te asusta / Y en el fondo puedes ver mejor / Que esto es un sueño… En lo suyo también resuenan aires de su tradición: en “1 2 3” se escucha el cajón peruano y otros instrumentos de la percusión tradicional de su tierra.
Lorena Blume
Lo primero que me llamó la atención de Blume fue la naturalidad de “Canción Q”, la primera de Cuchara chueca, su álbum debut de 2018. En su trabajo hay más inclinación a la música pop de aire orgánico, en la que también se incorporan sonidos del folclor, alusiones a la vida campirana. Una canción muy actual que se ancla en el pasado, aunque en el álbum haya asimismo aires de rock electrificado, como sucede en ciertos momentos de “La tormenta”, o bien alusiones a lo clásico como el violín que da personalidad a “Ana”. Tal como Danitse, la Blume hace de la experiencia de escribir letras una aventura lúdica y creativa. En “Canción Q” la limeña canta: Fuerza para trabajar / Ama para continuar / Ganas por si se nos va / Vida que a veces grita… Más hacia el bossa, divertida, risueña y soleada, resulta “Caribeña”. Y, “La muerte”, echa mano del cajón peruano para juguetear con una letra que describe con imaginación a ese personaje tan presente en nuestras vidas.
La Zorra Zapata
Aquí se percibe una aproximación más minimalista de la composición, más cercana a la canción de alcoba, de voz reflexiva e intimista, Nuria Zapata es en realidad una artista multidisciplinaria que ahora incursiona en la música. Pocos recursos para una canción que se asimila fácil y que anuda elementos del folk y la música pop y que gusta jugar con las voces. “Increíble” y “Hay que hacerlo” son prueba de ello. Aunque, “Una tendencia”, la primera de las ocho de este promisorio debut (2020), incorpora sonidos electrónicos. Una canción muy personal en la que, por ejemplo, la también nativa de Lima repite en la reposada “Las peores cosas, con una total perspectiva realista”: Hoy puedo imaginar las peores cosas para mí. El disco cierra con “Sólo adiós”, una a la que La Zorra Zapata ha agregado el subtítulo “La ranchera”, estilo que parece ser otra de sus influencias, el cual ella maneja desde un perspectiva muy suya.
LAT